Los futuros planes de exploración y explotación minera en el Noroeste Argentino despertaron la preocupación mundial por el impacto ambiental y social que tendrán estos proyectos en la región.
El geólogo tucumano e investigador de la UNT-CONICET, Carlos Cónsole Gonella, comentó que desde la International Union of Geological Sciences ( IUGS) se están promoviendo proyectos que no solo contemplen la explotación minera – aseguró – sino también el desarrollo de geoparques, parques naturales y la ejecución de proyectos educativos para la producción de conocimiento con una activa participación de las comunidades de origen.
Cónsole Gonella, miembro del Comité Ejecutivo de IUGS e investigador del INSUGEO, instituto de doble dependencia UNT-CONICET, destacó “la importancia que ha cobrado a nivel mundial el desarrollo y explotación del litio” en el NOA y, por lo tanto, cómo “el desarrollo de estos proyectos puede cambiar la matriz del desarrollo económico de la región”.
Los geólogos consideran que esos cambios deben tener en cuenta el aporte y necesidades de la comunidad con el impulso de su “participación en proyectos educativos y ambientales que tengan que ver con el rescate de las historia del patrimonio natural y cultural” de esos lugares.
En ese sentido, subrayó que existen “varias líneas de financiamiento en ejecución y queremos destacar el rol de la UNT y de otras universidades del NOA para ser receptoras de esos subsidios. La UNT es la unidad académica más grande del norte y la idea es prepararnos, desde el INSUGEO, para participar de varios proyectos internacionales juntos a otras universidades que, además, deben tener en cuenta la equidad de género”, entre otros requisitos, alertó.
Los investigadores apuestan a cumplir con “los objetivos de la UNESCO respecto al medio ambiente, al desarrollo económico sustentable, y para que el desarrollo científico tecnológico minero se vea representado en la comunidad beneficiada”. “Todos los organismos internacionales como la IUGS y los organismos de financiamiento como Banco Mundial o Banco Interamericano de Desarrollo, tienen como prioridad la participación de las comunidades” – asegura Cónsole Gonella.
“Se busca cambiar el modelo extractivo tradicional en la explotación minera, por un modelo de participación activa de las comunidades de origen que son especialmente tenidas en cuenta -como consejo vecinales y comunitarios-, en la elaboración de informes de impacto social, cultural y ambiental. La UNT tiene mucha experiencia en esto, como son los trabajos de impacto ambiental en Alumbrera y Agua Rica. La idea es que se fortalezcan esas redes de interacciones para el nuevo modelo de desarrollo”.
Por otra parte, se están planteando convenios cuyos fondos deberán estar destinados a proyectos educativos que permita que el acervo natural pueda ser protegido, cuidado y conocido.
Comunidad, investigación y desarrollo
“Hay un caso exitoso de trabajo conjunto entre organismos nacionales y provinciales y la comunidad que es la creación del geoparque en la localidad de Maimará de la Quebrada de Humahuaca, provincia de Jujuy”, relata el geólogo.
“Hay un caso exitoso de trabajo conjunto entre organismos nacionales y provinciales y la comunidad que es la creación del geoparque en la localidad de Maimará de la Quebrada de Humahuaca, provincia de Jujuy”, relata el geólogo.
“Allí hay uno de los yacimientos paleontológicos más importante del norte argentino y de Sudamérica. Lo interesante es el protagonismo que tiene la comunidad de Maimará que han sido gestora de su propio patrimonio desde el inicio de las investigaciones. Están colaborando con nosotros en la creación de un centro de interpretación paleontológico y de historia natural. Los investigadores aportan el guión científico; y la Provincia y la Nación están trabajando en la caminería para visitar las huellas de dinosaurios. Para nosotros es una gran satisfacción, porque luego de mucho trabajo vemos cómo nuestra investigación vuelve a la comunidad. Todo esto nació con el descubrimiento por parte de nuestro equipo de investigación, hace unos 15 años atrás, de un yacimiento con huellas de dinosaurios. Si bien se conocía, no había estudios sistemáticos hasta ese momento, por eso fue fundamental vincularnos con la comunidad desde el primer momento para poder desarrollar todo el trabajo que venimos realizando hasta ahora”, finalizó.