Las llamas han sido y siguen siendo el principal sustento de los pobladores de los Andes, ya que son fuente de alimento (su carne tiene un alto valor proteico), se usan para prendas (fibra, piel) y como animal de carga. Además, su sistema inmunológico produce pequeños fragmentos de anticuerpos (nanoanticuerpos) más pequeños que los anticuerpos humanos, con potencial para el tratamiento del COVID-19 y otras enfermedades.
(La nota completa puede leerse en el link arriba indicado)
