La Secretaría de Innovación, Desarrollo y Extensión de la Facultad de Medicina de la UNT fue adjudicada con becas para 5 investigadores por la convocatoria “Salud Investiga” del Ministerio de Salud de la Nación con el Proyecto “Prevalencia de síntomas respiratorios y oculares en niños de Tucumán en relación con la contaminación ambiental y estaciones del año”.
La Dirección del Proyecto lo realizará la Facultad de Medicina a través del Dr. Héctor Altieri; la codirección a cargo del Dr. Juan Carlos Santos; el Dr. Rodrigo Marañón, el Dr. Roque Baldasaria, Roque y Dr. Rodrigo Gibilico.
Previamente se realizó un convenio de trabajo con la Iniciativa Breathe 2 Change (que monitorea la calidad del aire en Tucumán) y con el Laboratorio de Estudios Atmosféricos (LEA) del Inquinoa (UNT- CONICET), cuyos referentes son Gibilisco, la Dra. Aída Ben Altabef y María Marta Sáez, responsables del monitoreo y mediciones ambientales.
El proyecto cuenta con la participación de la Secretaría de Estado de Medio Ambiente y la Dirección de Energía del Ministerio de Desarrollo Productivo. Además, alumnos, docentes y nodocentes serán capacitados en el diseño y ejecución del proyecto.
María Marta Sáez, una de las coordinadoras del proyecto, comentó que instalaron sensores en 12 escuelas de la provincia y que, de esta manera, se sumó la parte educativa al programa Breathe 2 Change. Afirmó que también participan el CONICET y la Facultad de Bioquímica, Química y Farmacia de la UNT. En ese sentido, la semana pasada se realizó el lanzamiento del proyecto en el Instituto JIM, del que participaron los referentes de la UNT, del CONICET, de la Provincia y de cada escuela participante.
“Analizaremos la incidencia de la contaminación del aire y la implicancia que puede tener en enfermedades respiratorias y oculares en niños de 7 a 11 años. Serán 5.000 chicos en total, cuyos padres responderán una encuesta sobre el estado de salud de sus hijos”, precisó Sáez. Agregó que hay escuelas ubicadas en lugares con menos contaminación, y otros más cerca de los ingenios y de la quema de pastizales. “Creemos que los resultados de las encuestas darán un panorama de cómo es la calidad del aire en Tucumán y de cómo eso les afecta a los niños”, puntualizó.
Lanzamiento de la iniciativa en una de las escuelas tucumanas
Iniciativa Breathe 2 Change
Rodrigo Gibilisco es doctor en Química e impulsor de la iniciativa Breathe 2 Change en Tucumán. El programa nació con el apoyo de la Fundación Alexander von Humboldt, a la que luego se sumaron otros actores de la Provincia y del país.
El programa fomenta una red de monitoreo de calidad del aire en Tucumán, por medio de sensores locales, para tomar el registro en diferentes localidades.
El sistema trabaja en conjunto con dos laboratorios de referencia federal. Los datos se integran en una plataforma, para luego dar acceso a la población de modo libre y gratuito y con distintos fines. Por ejemplo, en esto caso, para monitorear el impacto de la calidad del aire en la salud de la gente.
“Los sensores que usamos son similares a una boya de la pileta, es una tecnología modular pequeña, fácil de instalar en cualquier sitio y con conectividad wifi”, explicó Gibilisco. Agregó que mide pequeñas partículas que flotan en el aire y que los sensores mandan los datos, en tiempo real, a una plataforma que les permite analizar los resultados y saber qué elementos contaminan el aire a nivel local.