Se realizó la primera reunión de la Comisión revisora del protocolo de violencia de género

En la reunión de la Comisión Asesora para la reforma del Protocolo de Intervención Institucional ante denuncias por violencia de género, acoso sexual y discriminación de género se destacó que el proceso de modificación del mencionado Protocolo responde a la necesidad de revisar y mejorar el instrumento con el que hoy se cuenta para abordar las situaciones de violencia de género en la UNT. La mencionada Comisión Asesora tiene la finalidad de examinar y recomendar modificaciones para la reforma integral del protocolo en el plazo de sesenta (60) días, según lo establecido por el artículo N°4 de la resolución rectoral.  Su creación y labor, representa el compromiso que la Universidad Nacional de Tucumán tiene con el fortalecimiento de los Derechos Humanos, la igualdad y la erradicación de la violencia de género en todos sus claustros.

La Lic. Julia Saldaño encargada de la Secretaría de Género, Diversidades y Derechos Humanos dialogó con Medios UNT acerca de la importancia de esta asamblea: “El día de hoy se produjo la primera reunión de la comisión que fue creada para la reforma del protocolo de atención a las situaciones de violencia dentro de la universidad, de violencia o discriminación por orientación sexual. Tiene como misión revisar, analizar y modificar el protocolo. Es una comisión que está constituida por todos los sectores que conforman la universidad. Están los tres gremios docentes, el gremio no docente, las representantes por las referentes de protocolo de la universidad, representantes del equipo jurídico de nuestra universidad y de la secretaría y también del estamento estudiantil”, remarcó. 


Asimismo, la secretaria expresó: “Iniciamos un proceso que nos parece súper necesario. El protocolo es una herramienta y un instrumento muy importante que tenemos las universidades para poder abordar y tramitar las situaciones de violencia hacia la mujer o por discriminación sexual u orientación sexual. Y nos parece que es una herramienta que es absolutamente perfectible. Tiene que ir adecuándose a las condiciones de los escenarios sociales que siempre son complejos. Nuestro protocolo tiene seis años de vigencia dentro de la universidad y este nos parece un buen momento después de todo este tiempo como para pensar en su mejoramiento a partir, por supuesto, de la experiencia de estos años en el tratamiento de las situaciones de violencia”. 


La subsecretaria, la Prof. Sandra Márquez por su parte destacó: “Esta reunión es para darle inicio al proceso de modificación del protocolo de nuestra universidad y la verdad que me parece como muy importante a seis años de su implementación que estemos pensando en modificar el protocolo para cada vez más garantizar una universidad libre de violencias”. En esa misma sintonía enfatizó: “Hay varios puntos en el protocolo que son necesarios modificarlos, no solamente del procedimiento sino también de qué manera podemos ver cuáles son los tipos de violencias que existen y así de esa manera poder implementarlo al protocolo como corresponde. La resolución de creación de la comisión establece 60 días para trabajar para modificar el protocolo. De todas maneras, yo creo que en la medida en que vamos viendo cómo va trabajando la comisión capaz que, o se acorte el tiempo o tenga que darse un plazo posterior. La idea es que el protocolo refleje realmente cuál es la realidad de nuestra universidad”. 

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