En el marco de las celebraciones por los 100 años del Instituto Técnico (IT) de la Universidad Nacional de Tucumán, esta semana se desarrollan diversas actividades, entre las cuales tuvo lugar una conferencia a cargo del Ing. José Anibal Saracho, egresado de la institución y actual docente del nivel superior. Tras haber celebrado su primer título con la promoción de 1988, regresó a la Casa de Estudios para transmitir sus conocimientos y experiencias a los jóvenes que este año forman parte de la historia centenaria del IT.
Durante su presentación, Saracho dialogó con Medios UNT y expresó la emoción que encuentra en los colores azul y rojo de aquel edificio ubicado en Gral Paz y Jujuy. Te invitamos a conocer su experiencia:
“He sido convocado con motivo del festejo, realmente es una emoción para mí. La biblioteca está en el mismo lugar que en aquella época cuando realicé mis estudios. Destaco que también cursé en la Facultad de Ciencias Exactas y Tecnología de la Universidad Nacional de Tucumán en el Instituto de Estructuras, esto tiene que ver con el despertar de las vocaciones, porque yo estudié ingeniería por los profesores que tuve, arquitectos e ingenieros y me volqué por esa disciplina. Al ser docente sé el rol que tenemos y no sólo en la formación de esos recursos humanos, sino también pensando más allá, las ingenierías han sido declaradas carreras prioritarias, por lo tanto, siempre estas charlas tienden a informar para captar nuevos alumnos que quieran estudiar estas carreras”, remarcó.
Asimismo, le consultamos sobre ¿Qué significa para su vida la UNT? A lo que el Ing, no tardó en responder: “Desde los 13 años que ingresé al Técnico entendí las posibilidades que la UNT podía brindarme. Si bien, cursé los estudios universitarios en la UTN, regresé a esta gran casa de estudios por la maestría de Ingeniería Estructural. Soy muy agradecido. A uno lo entrenan como niño para ser un técnico, pero mucho más para ser una persona. Eso lo arrastro desde aquellos años que tuvieron una influencia determinante en mi vida”.
Finalmente, el egresado de la centenaria institución remarcó su apoyo por la educación pública. “Es importante que la sociedad sepa de la trascendencia de estas escuelas pre-universitarias. Yo no sabía, mi madre quiso que viniera a estudiar aquí. Y la sorpresa que me deparó el destino porque encontré mi vocación y sigo creciendo en torno a la ingeniería en lo que hace a la docencia universitaria, que es mi pasión”, concluyó.
