Este jueves 3 de julio, desde las 18 h, la Facultad de Filosofía y Letras será escenario de un encuentro abierto al diálogo y la participación política: el Debate de Candidatos Jóvenes. Con entrada libre y gratuita, la actividad invita a toda la comunidad universitaria y al público en general a escuchar, interpelar y reflexionar junto a quienes buscan construir futuro desde el compromiso político. Estos espacios no solo fortalecen la democracia, sino que amplifican las voces emergentes y abren paso a una ciudadanía activa y crítica. A continuación, compartimos las palabras del presidente de la Organización de Debates para las Ideas y el Saber, Lautaro Nuñez quien impulsa esta iniciativa con convicción y entusiasmo.
¿Cómo nació la idea de organizar un debate entre candidatos y candidatas jóvenes en Tucumán, y qué objetivo se propusieron desde la organización?
Esto empezó a finales de 2023, cuando estaba en un simple bar de Barrio Norte con unos compañeros de Estudiantes Organizados (otra organización en la que participo). Ahí, como si se tratara de un clic, me inspiré a formar un plan que pudiera reunir a toda la juventud de todos los partidos para debatir, como si fueran candidatos aspirando a ocupar cargos públicos. Decidí estudiar cómo se desarrollan las áreas de debate, y no solo me fascinó todo lo que nos brinda la democracia, sino también las herramientas que pone a disposición. Así que, como objetivo principal, nos enfocamos en preservar y difundir la participación juvenil ciudadana y la tolerancia política, entendiendo que desde 2023 atravesamos un contexto de fuerte polarización.
¿Qué representa para ustedes generar este tipo de espacios participativos como estudiantes de la UNT en una provincia como Tucumán, con tanta historia política?
Nos genera una gran satisfacción poder afianzar el objetivo que nos propusimos hace dos años. Es algo que, además de considerarlo necesario, nos impulsa a seguir fomentando debates que representen progreso y acción. Digo esto porque muchos politólogos y teóricos de la política y la sociedad han demostrado que generar este tipo de espacios dentro de la sociedad civil puede beneficiar enormemente a la educación política e influir en otros factores clave del desarrollo de un país, como el progreso social e incluso la economía. Hasta el día de hoy, nunca existió una actividad que represente de manera tan significativa lo que la nueva política tucumana necesita: caras nuevas, futuras promesas, jóvenes que pueden llegar a ocupar cargos públicos y formar parte activa de la vida política de nuestra provincia. Sin dudas, esta experiencia deja enseñanzas profundas y aprendizajes necesarios para fortalecer nuestro pensamiento crítico y enriquecer el debate de ideas.
¿Por qué crees que es clave que los jóvenes participen activamente en la política, ya sea como candidatos o como ciudadanos informados?
A lo largo de la historia argentina, los jóvenes han sido protagonistas de numerosos eventos y movimientos que transformaron el panorama político y gubernamental del país. Un claro ejemplo de esto es la Reforma Universitaria, que tuvo su origen en una revuelta juvenil. Entre 1917 y 1918, estudiantes y profesores exigían cambios concretos como el cogobierno estudiantil, la autonomía universitaria, los concursos públicos y la libertad de cátedra. Aquellas demandas impulsadas por los jóvenes de aquella época representan lo que hoy llamamos conciencia política, una actitud crítica y activa que nosotros, como juventudes, debemos sostener y profundizar para poder plantear nuestras propias demandas sobre los temas de fondo en nuestra provincia, sea cual sea sus ideologías pertinentes. Por eso, involucrarse en estas actividades (u otras similares) no es un acto meramente partidario, sino una forma concreta de transformación social.
Más allá del debate, ¿Qué tipo de impacto esperan lograr en la comunidad tucumana y, sobre todo, en la juventud?
Siempre pensé que organizar debates de este estilo no era solo parte de un proyecto individual, sino también el reflejo de un conjunto de valores que sigo y persigo. Quiero que la provincia, en general, se desarrolle en esa misma línea. Entiendo que, para algunos, esto puede parecer algo utópico o difícil de alcanzar, especialmente en una sociedad tan dividida y dicotómica como la nuestra. A Tucumán todavía le falta participación democrática y más espacios que promuevan el diálogo y el compromiso ciudadano.
