El Taller de Diseño 5 de la Tecnicatura Universitaria en Diseño de Indumentaria y Textil de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo (FAU-UNT) llevó su trabajo práctico un paso más allá del aula, transformando la teoría en un proyecto con profundo impacto social. Este año, la consigna de Indumentaria Adaptada —tradicionalmente orientada a prendas para niños con discapacidad— se concretó gracias a una colaboración con el Hogar San Benito.
La propuesta surgió a partir de la experiencia del año pasado, cuando una estudiante desarrolló una prenda para la madre de un niño con parálisis cerebral. “La invitamos a contar su historia, sus necesidades, y entendimos que nuestro trabajo práctico no podía quedar solo allí”, explicó Belén Páez, docente del taller.





El proyecto tomó forma con el aporte de Delfina Amenábar, también docente del taller y voluntaria en la fundación Apapacho con el alma, que acompaña a infancias sin cuidados parentales a través del juego y la estimulación. En el Hogar San Benito, esta fundación brinda atención especializada a niños, niñas y adolescentes con discapacidad severa y sin grupo familiar.
La propuesta de este año fue que cada estudiante diseñara y confeccionara prendas específicas para los chicos y chicas del Hogar, atendiendo a sus necesidades particulares. “Es un trabajo muy importante porque responde a una vacante social: no existe indumentaria adaptada en el mercado”, destacó Páez.


El proceso culminó el sábado 9 de agosto en la sede de la FAU, con la entrega de las prendas a cada niño. “Concluyó de una manera muy hermosa”, expresó la docente. Agradecieron a las empresas privadas participantes por sus aportes y donaciones realizadas.



Fuente: Comunicación FAU-UNT